Ulmus laevis Pall.

Nombre vulgar: se desconoce con seguridad el nombre vulgar que pudo tener, pero parece ser que pudo ser negrillo.

Descripción

Tan alto como Ulmus minor, puede también llegar a los 30 m. Su tronco grueso puede alcanzar 1,5 m de diámetro.

Las hojas, de peciolo corto (~ 12 mm); tienen de 10 a 20 pares de nervios secundarios. Es la que presenta mayor asimetría en la base (el desfase entre ambos lados llega a 13 mm). La superficie del haz es finamente pubescente y de tacto suave y el envés ligeramente tomentoso.

Las flores se disponen sobre unos pedicelos largos (de hasta 25 mm) y péndulos, reunidos en fascículos, que hacen que el árbol, todavía sin hojas, muestre una especie de mechones colgantes. Son bisexuales o masculinas, con una pieza externa con varios lóbulos asimétricos, con 5 a 9 estambres y un pistilo comprimido, con dos pequeños estigmas divergentes, plumosos y blancos.

Los frutos se presentan colgando de unos pedicelos largos. Son sámaras pequeñas, en torno al cm de diámetro, con el margen ciliado, el carácter que mejor le diferencia del olmo común. También difiere de él por la semilla, que se sitúa hacia la mitad inferior de la sámara.

Biología y fenología

La floración se produce a finales del invierno, con antelación a la brotación de las hojas, en un tiempo más tardío que Ulmus minor. La polinización se produce por el viento aunque algunos autores otorgan protagonismo a los insectos.

Los frutos maduran en la primavera ya avanzada, en un tiempo más tardío que los de Ulmus minor, pero igualmente después del desarrollo completo de sus hojas. Su producción es irregular (vecera).

Distribución y Ecología

Es una especie colonizadora, con una estrategia de dispersión análoga a la de otras especies de Ulmus.

En la Península Ibérica se encuentra en la actualidad entre los 300 y los 1000 m de altitud. Es una especie hidrófila, pero a diferencia de Ulmus minor, las escasas poblaciones actuales de este olmo limitan la interpretación de su hábitat. En general, debido a su mayor exigencia en agua, se considera que sus terrenos naturales son los márgenes de los cauces y las navas, resultando mucho menos frecuente en vegas o cauces donde el nivel freático desciende excesivamente en la época estival. En Europa se considera una especie tolerante a los suelos carbonatados pero la estirpe española se ha comportando en ensayos experimentales como calcífuga, un patrón poco habitual pero que se manifiesta en algunas otras especies.

Esta especie también ha sido conocida como Ulmus pedunculata.

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